El Atlético de Madrid sigue coliderando la Liga junto al Barça. Lo hace porque es un equipo con alma, con orden y, sobre todo, con calidad. Anoche lo volvió a demostrar ante el colista. Osasuna no tuvo muchas opciones en el Vicente Calderón, y cuando parecía que podía rascar algo apareció Radamel Falcao, el de siempre.
El primero lo anotó Miranda tras cabecear una falta lateral botada por Gabi. El segundo fue obra de Raúl García, que aprovechó un rechace en el área para batir a Andrés Fernández con un potente disparo cruzado. El futbolista navarro no quiso celebrar el gol por respeto a su ex equipo.
Justo antes del descanso Lamah recortó distancias con un gran disparo colocado ante el que poco pudo hacer Thibaut Courtois. Osasuna intentó estirarse un poco más en la segunda mitad, pero la falta de recursos y la aparición de Falcao desmoronaron cualquier intento de remontada. El colombiano aprovechó un gran centro de Juanfran para finiquitar el partido en el minuto 73.
