Ya avisó Unai Emery en la rueda de prensa anterior al debut de su equipo en Champions League. El Spartak de Moscú venía al Camp Nou a por los tres puntos, y le faltó poco para llevárselos. Al Barça de Tito Vilanova se le complicó mucho un partido que empezó ganando muy pronto. La lesión de Gerard Piqué, que tuvo que retirarse en el minuto 11 de partido, fue un problema que le costó dos goles a los azulgrana. La pareja formada por Alex Song y Javier Mascherano evidenció problemas de velocidad.
Cristian Tello anotó el primero de la noche después de recibir un balón de Xavi en el pico del área. Controló orientándose hacia la portería y disparó con mucha intención al segundo palo. La estirada de Dikan fue inútil.
Corría el minuto 11 y los aficionados se las prometían muy felices, pero antes de la media hora llegó el empate. Una buena jugada del Spartak por la banda derecha terminó en un centro que Dani Alves mandó a su propia portería sin que Víctor Valdés pudiera hacer nada para evitarlo. Así se llegó al descanso.
Tras la reanudación los rusos sorprendieron todavía más. Romulo completó un gran contraataque llegando desde la banda derecha con mucha fuerza. Definió muy bien y el 1-2 se instaló junto al pánico en el electrónico. Por suerte todavía quedaba media hora por delante.
La hora de Messi
Fue en ese momento cuando apareció Leo Messi. La estrella del Barça se encargó de darle la vuelta al partido, aunque no sin la ayuda de Tello y Alexis Sánchez. Ambos le asistieron para que se llevara la gloria en una noche que pintaba muy fea para los catalanes. Al final tres puntos y tranquilidad.
