El Liverpool se despidió de sus opciones de jugar en Europa la temporada que viene tras perder por 0-2 ante el Tottenham en un partido disputado en Anfield. Los de Kenny Dalglish no fueron capaces de perforar la portería de un rival que fue bastante superior y mucho más efectivo de cara a puerta. La nota «divertida» del partido la puso un espontáneo que saltó al terreno de juego en pelota picada. Pepe Reina tuvo que ser el encargado de acabar con su dosis de protagonismo.