El Real Madrid no falló en El Sardinero ante el Racing de Santander pese a que Cristiano Ronaldo no pudo jugar. Los blancos, que ayer jugaron con la segunda equipación de color negro, dieron un recital de buen fútbol y se impusieron sin demasiados apuros. Mesut Özil, con dos asistencias de lujo, y Karim Benzema, con dos goles más para su cuenta anotadora, fueron las estrellas del partido.
La primera parte del Madrid fue muy buena, sobre todo porque Özil tomó las riendas del equipo para demostrar que es uno de esos jugadores especiales, uno de esos jugadores que hoy en día sólo se encuentran en el FC Barcelona (véase Andrés Iniesta, Xavi Hernández o Lionel Messi). .
Xabi Alonso y Benzema avisaron con disparos que se estrellaron en el larguero. Las cosas funcionaban y el gol era cuestión de tiempo. Entonces apareció Özil. Combinó con Xabi Alonso y con Emmanuel Adebayor para finalmente dejar el balón en bandeja al togolés para que hiciera el 0-1. La jugada fue simplemente espectacular. Sólo tres minutos más tarde, en el 26, Benzema hizo el 0-2 aprovechando un pase de lujo de Özil con el exterior que le dejó solo ante Toño.
La segunda mitad no fue tan buena para los de la capital de España. El Racing trató de presionar más y tuvo alguna que otra buena ocasión. Pinillos falló un penalti cometido por Xabi Alonso resbalándose al disparar. Iker Casillas lo detuvo sin problemas. A pesar del error, los cántabros siguieron apretando y Kennedy recortó distancias en el minuto 69 batiendo por raso al meta madrileño.
Parecía que la reacción era posible, que la victoria del Madrid peligraba. Sin embargo, apareció otra vez Benzema cruzando el balón ante Toño para poner el 1-3 definitivo a falta de un cuarto de hora para la conclusión. Poco más tarde, Adebayor falló un penalti disparando muy flojo, al igual que había hecho Pinillos minutos antes.