El FC Barcelona está viviendo un auténtico calvario en su viaje a Milán, pues no lo puede hacer en avión por culpa de la nube volcánica que está paralizando el tráfico aéreo en buena parte de Europa. Los de Pep Guardiola han tenido que viajar en autobús y han empezado su ruta hoy, haciendo siete horas de viaje hasta Cannes, donde van a pasar la noche. Mañana reemprenderán la marcha durante tres horas más para llegar a la ciudad italiana donde se disputará el partido de ida de la Champions League. En total recorrerán cerca de 1.000 kilómetros.
El equipo no quiere poner excusas y quiere ganar al Inter pese al palizón de horas en carretera. Como si de un equipo amateur se tratase, tendrán que coger la cantimplora e irse de excursión a un estadio donde no les van a recibir precisamente con caramelos. José Mourinho, Thiago Motta y Samuel Eto’o están deseando enfrentarse al club que en su día les dio de comer.
Andrés Iniesta no ha viajado por las molestias físicas que le mantendrán unas semanas apartado. Quién sí lo hará es el canterano Fontás, quien cada vez está teniendo más protagonismo, tanto en entrenamientos como en convocatorias.