Según la prensa portuguesa, José Mourinho ha sido vigilado por un grupo de delincuentes macedonios relacionados con el crimen organizado italiano. Estos tenían grabaciones, datos personales y fotos del entrenador del Inter de Milán. Afortunadamente para él, la policía ha podido detener a todos los delincuentes. Sin embargo, ‘The Special One’ está planteándose la posibilidad de cambiar de domicilio para estar a salvo. De momento ha reforzado la seguridad para que su familia no sufra ningún ataque.
Además de Mourinho, otros cuatro jugadores del Atalanta estaban en el punto de mira de esta mafia formada por integrantes procedentes de Europa del este.