El Celta de Vigo que saltó al terreno de juego del Vicente Calderón nos recordó al que hace unos años maravillaba en Primera División. Sin grandes jugadores pero con mucha ilusión, este equipo se Segunda se mereció la victoria en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey. El Atlético de Madrid volvió a ofrecer su peor cara y salió vivo tras empatar 1-1.
Roberto Trashorras dejó muestras de su clase nada más iniciarse el encuentro. El ex del Barça y del Madrid (hablo de los filiales) se sacó un golazo de la chistera tras combinar a las mil maravillas con Iago Aspas, un jugador más que interesante. Los rojiblancos no se vinieron abajo y pudieron empatar 8 minutos más tarde a la salida de un córner. Fue el portugués Tiago, recién llegado, quien marcó de cabeza previa falta.
Así se llegó al descanso. La segunda mitad fue un auténtico recital gallego. Las ocasiones llegaron a pares y la defensa de los de la capital de España era un coladero. De Gea tuvo que convertirse de nuevo en la estrella de su equipo. Una estadística sirve para ilustrar lo que sucedió en este partido que debieron ganar los visitantes. El Atlético de Madrid sacó 3 córners y el Celta 12.
En el otro partido de los cuartos de final de la Copa el Racing de Santander se impuso a Osasuna por 2-1. Colsa y Diop marcaron para los locales en los minutos 63 y 84 respectivamente. Sin embargo, los pamplonicas siguen con vida en la competición gracias a un gol en el minuto 88 de Pandiani, el de siempre.