Arjen Robben y Philipp Lahm estuvieron a punto de romper la calma que se respira en el Bayern de Múnich después de los últimos resultados positivos que han hecho que el equipo recupere su estatus. El centrocampista holandés y el defensa germano tuvieron un choque que no gustó nada al ex del Real Madrid. Este le recriminó la entrada y los compañeros tuvieron que separarles para que el encontronazo no pasara a mayores.